Año nuevo… ¡Superluna!

Como recordarás, el pasado 3 de diciembre tuvo lugar el fenómeno de la Superluna. (Lo anunciábamos y lo explicábamos aquí).

Pues bien, un mes después, vamos a poder disfrutar, otra vez, del mismo fenómeno: ¡El 2 de enero del 2018 tenemos Superluna!

El perigeo lunar (es decir, la mínima distancia Tierra-Luna, y, por lo tanto, el máximo tamaño de la Luna en el cielo) va a tener lugar el día 1 por la noche (a las 22:48, hora local). Y la fase de Luna llena tendrá lugar tan solo unas horas después: la madrugada del día 2 (a las 03:24).

Es decir: el momento para contemplar la Superluna es la noche del día 1 al día 2.

Esa noche, la Luna estará visible a todas horas, desde el comienzo de la noche hasta el amanecer, y podremos verla con un tamaño un poco superior al normal, y con un brillo, también, más potente del habitual.

De todas formas, recomendamos especialmente (no sólo en época de Superluna, sino en cualquier época) contemplar el momento en que la Luna sale por el horizonte. El día 1 la Luna saldrá por el horizonte este (en Pamplona) a las 17:26.  Y el día 2, a las 18:31.  Ambos momentos prometen ser muy espectaculares.

Esperamos que las nubes nos permitan contemplar esta Superluna, y que la potente luz de este astro tan cercano nos ilumine y nos dé suerte para todo el año.

¡Feliz 2018!
🙂

Cómo observar la Superluna este domingo.

Este domingo, 3 de diciembre, va a tener lugar el fenómeno de la Superluna. Te explicamos qué es una Luperluna y cómo puedes observarla este domingo.

Qué es una Superluna:

Decimos que hay Superluna cuando coinciden, más o menos en la misma fecha, estos dos fenómenos: la fase de Luna llena y el perigeo lunar.

La fase de Luna Llena, como se sabe, es ese momento en que la Luna se ve en el cielo completamente iluminada por la luz del Sol, y por lo tanto, completamente redonda; cosa que ocurre aproximadamente una vez cada mes.

La Luna llena.

El concepto de perigeo lunar requiere un poco más de explicación: La órbita de la Luna alrededor de la Tierra no es circular, sino elíptica, de modo que unas veces la Luna está más cerca de la Tierra que otras. El perigeo es el momento en que la Luna se encuentra más cerca de la Tierra, y por lo tanto cuando se ve más grande. (En contraposición, tenemos el «apogeo», que es cuando está más lejos, y por lo tanto se ve más pequeña). A la Luna le cuesta dar una vuelta a la Tierra aproximadamente un mes, así que se produce un perigeo aproximadamente una vez cada mes.

Perigeo y apogeo.

Las Lunas llenas y los perigeos son dos fenómenos independientes entre sí. Es decir, que no tienen por qué coincidir en la misma fecha. Pues bien, cuando sí se da esta coincidencia (es decir, cuando tenemos Luna llena y además ésta se encuentra a la mínima distancia a la Tierra y por lo tanto se ve en el cielo con un tamaño mayor de lo habitual) decimos que hay una SUPERLUNA.

El tamaño de la Superluna:

Los días de Superluna, los medios de comunicación suelen mostrarnos unas hermosas y espectaculares fotografías de la Luna en las que ésta aparece con unos tamaños enormes, dando a entender que la Superluna se ve realmente así de gigante y espectacular.

Pero realmente no es así. En realidad, el tamaño aparente de la Luna no varía tanto. En esta ilustración vemos cuál es la diferencia de tamaño entre una una Superluna y una Luna llena «normal». La diferencia es de aproximadamente el 14%, pero no más.

Diferencia de tamaños entre la Luna más grande y la más pequeña.

La Supeluna tiene, pues, un tamaño un poco mayor que otras Lunas llenas, sí, pero sin ser una diferencia espectacular. De hecho, si no nos dijeran que estamos aunte una Superluna, quizás ni nos daríamos cuenta.

Entonces… esas espectaculares fotografías de Superlunas gigantes que nos muestran los medios de comunicación… ¿No son verdaderas? Sí, lo son, pero están hechas con zoom; y es por eso que la Luna aparece con esos tamaños tan increiblemente grandes.

Con un buen zoom se pueden conseguir Lunas enormes.


La Superluna del domingo 3 de diciembre. Cómo observarla:

La fase de Luna llena va a tener lugar el domingo por la tarde (exactamente a las 16:48), y el perigeo tendrá lugar la mañana del lunes (a las 9:43). Así que el mejor momento para observar esta Superluna es la noche del domingo al lunes. La Luna será visible durante toda la noche.

Para este domingo recomiendo fervientemente contemplar la salida de la Luna por el horizonte este, que tendrá lugar por la tarde. Para ello, deberemos buscar un lugar de observación con el horizonte lo más despejado posible y mirar hacia el este.
La Luna saldrá por el horizonte hacia las 17:55 (hora local). (El dato es para Pamplona, pero varía poco para otras zonas de Navarra). Será un auténtico espectáculo contemplar cómo se asoma poco a poco la Luna por el horizonte y cómo va ascendiendo lenta y majestuosamente en el cielo.

La salida de la Luna, el domingo por la tarde.

La salida de la Luna por el horizonte es uno de los espectáculos más impresionantes que nos ofrece el firmamento, porque la Luna, en estas circunstancias, se ve con un tamaño enorme.

La Luna saliendo por el horizonte.

 

En realidad, el que la Luna nos parezca tan grande cuando está cerca del horizonte es una ilusión óptica, o más bien «psicológica». La mente humana percibe con un tamaño mayor los objetos celestes cercanos al horizonte que los lejanos, aunque realmente tengan el mismo tamaño angular. A esto se le conoce como «ilusión lunar».

Tras observar la salida de la Luna, podemos seguir contemplándola. Conforme ascienda y se vaya alejando del horizonte, al desaparecer la «ilusión lunar», nos parecerá cada vez más pequeña. Pero no importa. Con su aspecto redondo imponente, esta Surpeluna va a seguir estando espectacular durante toda la noche.

Si nos fijamos bien en ella, veremos que, efectivamente, es un poco más grande que otras Lunas llenas. Incluso las manchas de su superficie (los mares) a simple vista parecen verse un poco mejor.

Pero fijémonos también en otra cosa: la Luna no sólo se ve un poco más grande de lo habitual. Se ve también… ¡más brillante! Y es que, según dicen, el brillo de las Superlunas puede ser hasta un 30 % mayor que el de otras lunas llenas. ¡Esto es una diferencia realmente apreciable!

La Superluna de noviembre del 2016 sobre Pamplona: ¡super brillante!

En definitiva: Si cualquier Luna llena es ya de por sí un espectáculo excepcional, este domingo tenemos un motivo más para observarla, pues no va a ser una Luna normal.  Puede que el nombre sea un poco exagerado y sensacionalista, pero va a ser… ¡¡una Superluna!!!

¡¡¡No te la pierdas!!!
🙂

La Luna brilló en Pamplona en su Noche Internacional.

Este sábado 28 de octubre se ha celebrado en todo el mundo la International Observe the Moon Night (Noche Internacional de Observación de la Luna), y un año más la Agrupación Navarra de Astronomía-Nafarroako Astronomia Elkartea lo ha celebrado sacando los telescopios a la calle y mostrando la Luna a todas aquellas personas que querían contemplarla.
Os contamos cómo ha acontecido el evento este año:

El cartel del evento.

Ese día, por la mañana y gran parte de la tarde, el cielo de Pamplona estuvo casi completamente cubierto por las nubes, lo que nos hacía temer que por la noche no podríamos ver la Luna. Pero al llegar la noche, de manera casi milagrosa (como si la Luna hubiera hecho un pacto con las nubes), el cielo se despejó. Las nubes se abrieron, como se abre un gran telón antes de comenzar un espectáculo, y así pudo dar comienzo en la Vuelta del Castillo de Pamplona el espectáculo… El espectáculo de la Luna!!!

El espectáculo de la Luna.

 

Así, durante las tres horas que duró el evento, muchas personas se fueron acercando al lugar de observación para contemplar la Luna a través de los telescopios. Algunas iban de paso, otras se quedaron mucho rato… pero al final fueron muchas, muchas las personas que pudieron admirar la Luna a través de los telescopios.

Muchas personas asistieron al evento.

 

Muchas personas no habían visto antes la Luna a través de un telescopio, y, al contemplarla, mostraron gran sorpresa y admiración al poder ver en ella los cráteres, los mares, las cordilleras…

La Luna estaba aproximadamente en fase de cuarto creciente, y las sombras producidas por sus cráteres y cordilleras eran especialmente llamativas en la zona del terminador (la zona que divide la zona oscura de la zona iluminada), resultando especialmente llamativo todo el relieve de esta zona.

La Luna a través de uno de los telescopios.

 

Hay que destacar, entre el público asistente, la presencia de muchos niños, que, como suele ocurrir en estas ocasiones, disfrutaron de manera muy especial de la visión de la Luna y se mostraron especialmente agradecidos.

Por cierto, hubo quienes incluso en el comienzo de la noche pudieron ver el planeta Saturno con sus anillos. Un «bonus» de lujo en esta noche tan especial.

En definitiva, ésta ha sido una exitosa velada lunar. Un año más, la Noche Internacional de Observación de la Luna, ha sido en Pamplona ocasión, no sólo para contemplar y admirar a nuestro satélite natural, sino también para hablar, debatir y reflexionar en buena compañía sobre la Luna y otros temas del espacio.

(El único inconveniente… el frío.
Pero, no nos quejemos de ello, que estamos a finales de octubre!)

Un cordial y lunático saludo!
😉

InOMN 2017 en Pamplona: observación pública de la Luna en la Vuelta del Castillo.

Este sábado 28 de octubre se celebra en todo el mundo la International Observe the Moon Night (Noche internacional de observación de la Luna), y, un año más, la Agrupación Navarra de Astronomía lo va a celebrar sacando los telescopios a la calle y mostrando la Luna a todo el mundo que quiera mirarla.

La cita es a partir de las 20:00h en la Vuelta del Castillo (Pamplona), junto a la estación de autobuses.

Te invitamos a acudir y a disfrutar en grata compañía de la impresionante visión de la Luna a través del telescopio.

¡Te esperamos!
🙂

 

Cómo observar las Perseidas 2017

Estamos en agosto, y, una vez más, tenemos aquí la lluvia de meteoritos más famosa del año: las Perseidas, también conocidas como «lágrimas de San Lorenzo». A continuación te damos unos consejos para observarlas este año (2017) desde Navarra:

Aunque las Perseidas tienen un periodo de actividad bastante largo (aproximadamente desde el 17 de julio hasta el 24 de agosto), es en torno a los días 11, 12 y 13 de agosto cuando tiene lugar su máxima actividad y cuando deben ser observadas.

Este año la máxima actividad de las Perseidas está previsto que ocurra el día 12, probablemente en algún momento en que aquí sea de día (por la tarde). Por lo tanto, la mejor noche para salir a observar esta lluvia este año es la noche del 12 al 13 (noche del sábado al domingo).

Para observar meteoritos, lo mejor es ir a un sitio oscuro, lo más alejado posible de la contaminación luminosa de las ciudades, y, una vez allí, tumbarse en el suelo o en una hamaca mirando hacia el firmamento. Los meteoritos pueden aparecer en cualquier lugar del cielo.

Este año va a haber un elemento que va a dificultar la observación de las Perseidas: la Luna. La noche del 12 al 13, ésta estará iluminada al 72%, por lo que dará mucha luz al cielo, impidiéndonos ver los meteoritos más débiles.

Así estará la Luna en la noche de las Perseidas.

Esa noche, la Luna sale por el horizonte este hacia las 24:00h, como se ve en este dibujo:

La Luna saliendo por el horizonte.

Así que el mejor momento para observar las perseidas esa noche será desde que anochezca (hacia las 22:30) hasta la salida de la Luna (hacia las 24:00).

Después de esa hora, con la presencia de la Luna, podemos seguir observando, claro, pues aunque los meteoritos más débiles queden eclipsados por la luz de la Luna, sí podremos visualizar los más brillantes. Y puede que incluso veamos algún bólido.

El que veamos muchos o pocos meteoritos, es imprevisible, y depende un poco de la suerte que tengamos.

Pero una cosa es segura: cuando veamos uno en el cielo, como siempre… ¡Va a ser una sorpresa!

¡Imprevisibilidad y sorpresas en el cielo!

¡Así es la magia de los meteoritos!

Deseamos que veas muchos, y te enviamos un cordial saludo.

Cómo observar Saturno este verano.

El planeta Saturno se encuentra en este mes de junio en el momento más favorable del año para su observación. El día 15 se encuentra «en oposición» respecto al Sol. Esto significa que, en torno a esta fecha, su distancia a la Tierra es menor que el resto del año, observándose, además, durante toda la noche.

Además, este año es especialmente favorable para contemplar sus anillos, porque la inclinación de éstos respecto a la Tierra es mayor que otros años.

Cómo localizar Saturno en el cielo:

Al igual que el resto de planetas «clásicos» (Mercurio, Venus , Marte y Júpiter), Saturno es visible a simple vista, mostrando un brillo considerable que lo hace destacar entre las estrellas.

Estos días se encuentra situado en la constelación de Ofiuco. En estas imagenes vemos cuál es la posición de Saturno en el cielo, mirando hacia el sur, los días 15 de junio, julio y agosto a las 23:30h:

Saturno el 15 de junio.

El 15 de julio.

El 15 de agosto.

Como se ve en las imágenes, la posición de Saturno dentro de Ofiuco varía muy poco (el movimiento propio de Saturno entre las estrellas es muy lento). Lo que sí varía, obviamente, es la posición de Ofiuco en el cielo.

En estos días, Saturno va a tener un brillo en torno a la magnitud 0. Es un brillo muy inferior al de su compañero Júpiter (al cual vemos todas estas noches en Virgo), pero muy superior al de la mayoría de las estrellas. Su brillo es similar al de las estrellas Vega y Arturo.

A simple vista, obviamente, no podemos ver sus anillos, pero sí podemos distinguir el color característico de este planeta: un especie de amarillo poco vivo, un poco parduzco.

También a simple vista, podemos comprobar una cualidad propia de los planetas: que éstos, cuando brillan en el cielo, al contrario que las estrellas, no titilan. Cerca de Saturno (a su derecha) vemos la estrella Antares, cuyo parpadeo incesante podemos comparar con la luz fija de Saturno.

Los anillos:

Este año (2017) es uno de los más favorables para contemplar -con un telescopio- los anillos de Saturno. Como se sabe, la inclinación de Saturno respecto a la Tierra no es igual todos los años, y, por lo tanto, la inclinación con que vemos sus anillos tampoco lo es: a veces los vemos «de canto» (como ocurrió en el año 2009), y otras veces éstos nos muestran una gran amplitud; como es el caso de este año, en el que los vamos a ver con la máxima amplitud posible (27º).

Distintas inclinaciones de Saturno en distintos años.

Así que, por este motivo, este es un buen año para contemplar, con telescopio, los anillos de Saturno.

Cualquier telescopio de aficionado, por muy pequeño que sea, nos permite ver los anillos, siendo ésta una imagen fascinante. Obviamente, la imagen será mejor cuanto mejor sea el telescopio. Pero también es fundamental el estado de la atmósfera: un exceso de turbulencia impide la observación planetaria.

Si las condiciones son buenas, podremos distinguir, en los anillos, la división de Cassini, que es el espacio oscuro que hay entre el anillo A y el anillo B.

Imagen telescópica de Saturno. Obsérvese la división de Cassini.

La atmósfera de Saturno:

Además de los anillos, con un buen telescopio es posible distinguir las bandas nubosas del planeta, que, tal como ocurre con el planeta Júpiter, por efecto de la rotación del planeta, discurren paralelas al ecuador. No obstante, las bandas de Saturno son mucho más tenues y difíciles de distinguir que las de Júpiter.

Satélites de Saturno:

Saturno posee varias decenas de satélites, de los cuales con telescopio de aficionado podemos distinguir unos siete. El más brillante es Titán, que se ve con cualquier telescopio sin ninguna dificultad. Otros, más débiles, son (por orden de brillo): Rhea, Japeto, Tetis, Dione, Encélado y Mimas.

Satélites de Saturno.

Cuando vayamos a observar Saturno, es conveniente consultar cuál es la posición de los satélites en el momento de la observación, para no confundirlos con estrellas, cosa bastante habitual.

Conclusión:

La temporada de Saturno ha comenzado. Este mes (junio) es el más favorable para su observación, aunque va a seguir viéndose magníficamente bien durante todo el verano.
No podemos desaprovechar esta ocasión de contemplarlo y dejarnos sorprender por la maravillosa visión de sus anillos, siempre misteriosos, insólitos y fascinantes.

Así se vio la ocultación Luna-Albebarán (28 abril 2017)

Así se vio la ocultación Luna-Albebarán (28 abril 2017)

Tal como habíamos anunciado aquí, ayer por la tarde se produjo la ocultación de la estrella Aldebarán por la Luna.

No pudimos ver el momento de la ocultación, porque ocurrió de día, habiendo demasiada luz en el cielo, pero sí vimos, con ayuda de prismáticos, el momento de la reaparición. La estrella Aldebarán reapareció por el borde iluminado de la Luna.

Os muestro estas fotografías que realizamos.  En las dos primeras vemos a Aldebarán recién aparecida por el borde de la Luna:

Estas otras dos fotos son posteriores; cuando Aldebarán se había alejado más de la Luna.  En estos momentos, al ir haciéndose de noche, ya no hacían falta prismáticos, y era muy bonito ver la pareja Luna-Aldebarán brillando en el cielo:

Ocultación de la estrella Aldebarán por la Luna el 28 de abril.

Este viernes (28 de abril) va a suceder un curioso fenómeno astronómico: la ocultación de la estrella Aldebarán (la más brillante de la constelación de Tauro) por la Luna.

El fenómeno va a suceder por la tarde, y con la Luna en una fase creciente muy, muy fina. Éstos son los datos del fenómeno (referidos a Pamplona):

La desaparición de la estrella tras el borde de la Luna va a tener lugar a las 20:19 (hora local). La estrella se ocultará por el borde oscuro de la Luna, como se ve en esta ilustración. La mala noticia es que en ese momento todavía será de día (el Sol se pone a las 21h), por lo que el fenómeno va a ser prácticamente inobservable (en todo caso habría que emplear un telescopio).

Aldebarán en el momento de ser ocultada por la Luna.

 

La reaparición tiene lugar una hora después: a las 21:19 (hora local). Aldebarán reaparece por el borde iluminado de la Luna.  En ese momento el cielo todavía estará muy iluminado por la luz del ocaso (el Sol se habrá puesto unos 20 minutos antes), así que la reaparición no podrá apreciarse a simple vista. No obstante, sí podremos verla con prismáticos. Y con un telescopio también, por supuesto.

Aldebarán apareciendo por el borde iluminado de la Luna.

En definitiva: por las condiciones de luminosidad del cielo, ésta no va a ser la mejor ocultación Luna-Aldebarán que podamos observar, ni mucho menos. Pero, aún así, si tenemos unos prismáticos o pequeño telescopio, merecerá la pena observar el momento de la reaparición de la estrella, que siempre es un fenómeno bonito y fascinante.

Cómo observar Júpiter estos días.

El planeta Júpiter, el más grande del Sistema solar, alcanza estos días la menor distancia a la Tierra, de modo que nos encontramos en la mejor época para su observación. A continuación damos unas instrucciones de cómo observarlo:

A simple vista:

Júpiter (al igual que los planetas Mercurio, Venus, Marte y Saturno) puede verse en el cielo a simple vista sin ninguna dificultad, pues posee un brillo muy potente.
Durante este mes de abril, brillará con una magnitud aproximadamente de -2,5. Es decir, será el astro más brillante del cielo, si exceptuamos el Sol, la Luna y Venus al amanecer.

Júpiter sobre Pamplona el 03-04-2017.

Cómo localizarlo:

Debido a su potente brillo, no hay dificultad ninguna en localizarlo.  El 7 de abril se encuentra «en oposición». Esto quiere decir que en el cielo se encuentra situado en el lado opuesto al Sol. Es decir, que cuando el Sol se pone por el horizonte oeste, Júpiter sale por el horizonte este. Así, en el comienzo de la noche (conforme el Sol va descendiendo por debajo del horizonte) Júpiter va ascendiendo en el cielo nocturno. Conforme va avanzando la noche, se va desplazando del este hacia el oeste, pasando por el sur en la mitad de la noche, hasta meterse por el horizonte oeste en el momento en que sale el Sol por el este.

Es decir, estos días (en torno a la fecha de oposición) Júpiter se ve durante toda la noche.

Y, por cierto, va a estar situado, ahora y en los próximos meses, en la constelación de Virgo, a no mucha distancia de la estrella Spica.

En esta imagen vemos su posición el 7 de abril hacia las diez y media de la noche:

Mirando hacia el este el 7 de abril.

El hecho de que Júpiter esté «en oposición» también conlleva que la distancia de Júpiter a la Tierra es la mínima del año. Es decir, que su brillo tamaño aparente son mayores que en el resto del año.

Conjunciones de Júpiter con la Luna:

Aunque Júpiter estará muy brillante todos los días (hasta el mes de octubre, en que dejará de verse), hay una serie de días en que recomiendo de manera especial mirarlo: los días en que va a estar en conjunción con la Luna. La imagen de ambos astros tan juntos, observada a simple vista, será muy bonita.

En esta imagen vemos cómo se verán la Luna y Júpiter este lunes 10 de abril hacia las once de la noche. La distancia entre ambos será de sólo 2º.

La Luna y Júpiter, muy juntos el 10 de abril.

Otras conjunciones muy interesantes de Júpiter con la Luna se van a dar el 7 de mayo y el 3 de junio.


Mirando a Júpiter con prismáticos:

Ya hemos visto que contemplar Júpiter a simple vista no posee ninguna dificultad, pues destaca en el cielo como un punto muy brillante. Pero, ¿Qué podemos ver con unos prismáticos?

Con unos prismáticos veremos Júpiter más brillante, pero no conseguiremos distinguir su forma, salvo que los prismáticos tengan unos aumentos considerables. Para ello necesitamos un telescopio.

Sin embargo, con prismáticos sí es posible distinguir los satélites de Júpiter. Nos referimos a sus cuatro satélites principales, los denominados «galileanos» (porque fueron descubiertos por Galileo en 1610), que son Io, Europa, Ganímedes y Calisto.

Éstos se ven como unas «estrellicas» situadas muy cerca del brillante planeta y en posición alineada.  El número de satélites que podamos distinguir dependerá de la calidad y aumentos que tengan los prismáticos, pero es muy probable que podamos distinguir varios. Además, si los miramos en días diferentes, veremos que la posición de éstos respecto a Júpiter va cambiando, pues se mueven alrededor del planeta.

Con telescopio:

Con un telescopio de aficionado ya distinguimos «tamaño» a Júpiter. Lo vemos como un pequeño disco blanco, pudiéndose apreciar que no es un círculo perfecto, sino que está ligeramente achatado por los polos.

Además, podemos ver sus bandas nubosas atravesando el disco del planeta. Veremos más o menos cantidad de bandas en función de la calidad del telescopio, pero, con cualquier telescopio, por pequeño que sea, lo normal es distinguir al menos las dos principales (la banda ecuatorial norte y la banda ecuatorial sur) como dos líneas oscuras paralelas al ecuador.

Aspecto de Júpiter con telescopio.

Respecto a los satélites de Júpiter, con telescopio lo más probable es que veamos los cuatro, pero también puede ocurrir que alguno de ellos esté temporalmente ausente porque se haya escondido detrás de Júpiter, o delante, o porque esté eclipsado por la sombra de éste.

El movimiento de los satélites alrededor del planeta se aprecia en muy poco tiempo, incluso en una misma noche de observación, de modo que no es raro que en nuestras observaciones veamos aparecer o desaparecer algún satélite.

Esto es lo que se denomina «fenómenos de los satélites de Júpiter«, y son muy interesantes y fáciles de observar con telescopio. Los fenómenos que podemos observar son:
– La ocultación de un satélite por detrás de Júpiter (y su posterior reaparición).
– El tránsito de un satélite por delante de Júpiter.
– El tránsito de la sombra de un satélite por delante de Júpiter.
– El eclipse de un satélite al ser oscurecido por la sombra de Júpiter.

Estos fenómenos son bastante frecuentes (todas las noches se da alguno). Es recomendable consultar cuándo se van a producir, para poder observarlos.

Ganímedes a punto de ser ocultado por Júpiter.

Conclusión:

La temporada de Júpiter ha comenzado. Estos días, en torno a su «oposición», son los más propicios para observarlo, pero podremos seguir viéndolo magníficamente en los meses posteriores, incluído todo el verano.

Con telescopio o sin él, no debemos perder la ocasión de contemplar a este planeta gaseoso, que es el más grande y majestuoso del Sistema solar.

Venus, Marte… ¡y conjunción Marte-Urano el 26 de febrero!

Los planetas Venus y Marte llaman nuestra atención estos días al comienzo de la noche. ¡Pero prestemos atención también a la conjunción Marte-Urano del 26 de febrero!

El brillantísimo Venus.

 

Llevamos ya varios meses contemplando, en los atardeceres y en el comienzo de la noche, al brillantísimo planeta Venus sobre el horizonte oeste, sorprendiéndonos y maravillándonos con su potentísima luz.

Su brillo es tan potente (magnitud -4,5 estos días), que no pasa desapercibido por nadie. De hecho, es el astro más brillante del cielo si exceptuamos el Sol y la Luna. Es tan brillante que incluso puede verse a plena luz del día; si sabemos donde mirar, claro.

El brillantísimo Venus en el comienzo de la noche.

En las próximas semanas vamos a seguir disfrutando de su presencia y de su espectacular brillo sobre el horizonte oeste, si bien cada día lo vamos a ver un poco más cercano al Sol y dejaremos de verlo, por su excesiva proximidad al Sol, a finales de marzo (conjunción con el Sol el 25 de marzo). A partir de entonces pasará a verse por las mañanas antes del amanecer.

 

Cerca de él, Marte.

 

Lo que quizás nos haya pasado más desapercibido, por su menor brillo, es el planeta Marte, que estos días se encuentra en el cielo muy cerca de Venus.

El brillo de Marte (estos días en torno a la magnitud 1,3) es más que suficiente para ser visto incluso con la contaminación luminosa de las ciudades, pero palidece – y por eso quizás nos pasa desapercibido- en comparación con el del brillantísimo Venus.

El brillante Venus. Y más débil (encima de él y a su izquierda) el planeta Marte.

 

La conjunción Marte-Urano:

 

A finales de febrero va a tener lugar un curioso fenómeno astronómico: una conjunción entre los planetas Marte y Urano. El día del máximo acercamiento (el 26 de febrero) ambos planetas van a estar a una distancia visual de tan solo 0,6º.

La mejor hora para contemplar esta conjunción será recién oscurecido el cielo (hacia las ocho de la tarde puede estar bien), pues más tarde los dos planetas irán perdiendo altura sobre el horizonte.

Eso sí, Urano posee un brillo muy bajo (en torno a la magnitud 5,8), así que no se ve a simple vista. Para verlo habrá que usar por lo menos unos prismáticos.

Deberemos mirar, pues, con los prismáticos, al planeta Marte, y, a partir de él, localizar a Urano.

A continuación pongo unos dibujos donde vemos la posición que van a tener Marte y Urano en los días de esta conjunción (del 24 al 28 de febrero) a las ocho de la tarde:

Venus y Marte a simple vista el 24 de febrero. El cuadrado rojo corresponde, aproximadamente, a los dibujos de abajo; donde debemos mirar con primáticos para ver a Urano.

Día 24. Urano a aproximadamente 1,5º de Marte.

Día 25. Urano se habrá acercado un poco más a Marte. Aproximadamente a 1º.

Día 26. ¡El máximo acercamiento! Urano y Marte a sólo 0,6º de distancia.

Día 27. Marte y Urano ya han comenzado a separarse. La distancia es de aproximadamente 1º.

Día 28. Continúan separándose. La distancia es ya de 1,5º.

En definitiva, estos días estaremos pendientes de esta conjunción. Urano es un planeta al que, por su escaso brillo, pocas veces miramos, así que este acercamiento al planeta Marte va a ser una ocasión ideal para localizarlo con facilidad en el cielo.

¡Te animamos a observarlo!